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Una antología de la Asociación Prometeo de Poesía

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Poesía de Siempre      Luis CERNUDA


Luis CERNUDA







La antología Poesía de Siempre se ha preparado con 50 poetas de lengua española contenidos en el libro Poetas del pasado, de Juan Ruiz de Torres, más otros seleccionados, ilustrados y comentados por distintos antólogos cualificados, en varios países.

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BIOGRAFÍA.
Sevilla (España), 1902-1962. Hijo de padre militar, se educó en un ambiente de estricta disciplina. Estudia Derecho en la Universidad de Sevilla. Se traslada a Madrid, donde conoce círculos literarios que frecuentan figuras de la que luego se conocerá como Generación (o Grupo) del 27. Un año actúa como lector de español en la Universidad de Toulouse. Durante la Guerra Civil Española participa en el II Congreso de Intelectuales Antifascistas de Valencia. En 1938 va a Inglaterra a dar unas conferencias y ya no regresa a España. Comienza un exilio que comienza en Inglaterra, continúa en Escocia y acaba -a partir de 1952- en México, donde murió. Entre sus obras se encuentran Perfil del aire (1927), Un río, un amor (1929), Donde habite el olvido (1934), La realidad y el deseo (1936-1964), Las nubes (1940), Ocnos 1942-1963), Con las horas contadas (1950-1956), Poemas para un cuerpo (1957) y Desolación de la quimera (1962). (Enrique Valle)


DONDE HABITE EL OLVIDO
en los vastos jardines sin aurora;
donde ya sólo sea
memoria de una piedra sepultada entre ortigas
sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.
Donde mi nombre deje
al cuerpo que designa en brazos de los siglos,
donde el deseo no exista.

En esa gran región donde el amor, ángel terrible,
no esconda como acero
en mi pecho su ala,
sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento.

Allá donde termine este afán que exige un dueño a imagen suya,
sometiendo a otra vida su vida,
sin más horizonte que otros ojos frente a frente.

Donde penas y dichas no sean más que nombres,
cielo y tierra nativos en tomo de un recuerdo;
donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,
disuelto en niebla, ausencia,
ausencia leve como carne de niño.

Allá, allá lejos;
donde habite el olvido.


EL AMANTE

La noche de agosto confundía el mar y el cielo
negros en una misma vastedad, de la que se
apartaba, tal el principio de un mundo increado,
la línea grisácea de la playa. Por ella, desnudo
bajo el ropaje blanco, andaba yo a solas, aunque
los amigos, nadando mar adentro, me llamaban
para que les siguiese. Y entre todas sus voces,
yo distinguía una fresca y pura.
El mar guardaba aún en su seno el calor del día,
exhalándolo en un aliento cálido y amargo que
iba a perderse por el aire nocturno. Entre la
sombra de la playa anduve largo rato, lleno de
dicha, de embriaguez, de vida. Pero nunca diré
por qué. Es locura querer expresar lo
inexpresable. ¿Puede decirse con palabras lo
que es llama y su divino ardor a quien no la ve
ni la siente?
Al fin me lancé al agua, que apenas agitada por
el oleaje, con movimiento tranquilo me fue
llevando mar adentro. Vi a lo lejos la línea
grisácea de la playa, y en ella la mancha blanca
de mis ropas caídas. Cuando ellos volvieron,
llamando mi nombre entre la noche,
buscándome junto a la envoltura, inerte como
cuerpo vacío, yo les contemplaba invisible en la
oscuridad, tal desde otro mundo y otra vida
pudiéramos contemplar, ya sin nosotros, el lugar
y los cuerpos que amábamos.


COMENTARIOS
El poeta de la voz mínima, de la voz fina, elegante, por momentos casi fría, siempre dolorida, a veces confusa. Una voz que ha ido cobrando cada vez mayor fuerza a lo largo de las últimas décadas, hasta afirmarse como una de las más originales que el Grupo del 27 produjo. A nuestro entender, la que más perdurará, y desde luego la que llama con más fuerza a los poetas actuales, de vuelta de las estridencias de la vanguardia. Traductor de la poesía inglesa y alemana, crítico literario, en pocos pero magníficos poemarios, fue desarrollando su singular edificio lírico, en el que la peripecia personal se sublima para abarcar el dolor de todos los hombres ante la felicidad que tienen delante, pero inasible. (Juan Ruiz de Torres)